Técnicas de conducción deportiva

Antes de nada, no te estamos incitando a correr, pero de vez en cuando hay que darle una alegría al cuerpo (y en este caso al coche). Porque para los aficionados al motor, las palabras como: carreras, velocidad y rpm (revoluciones por minuto) son sinónimo de diversión. En Sevencars insistimos en una conducción responsable, por eso te recomendamos que utilices las siguientes técnicas de conducción deportiva, solo en track days (tandas de circuito).

España no es un lugar con gran cultura de coches, pero contamos con circuitos muy válidos para hacer las delicias de cualquier apasionado de las cuatro ruedas. Con estos consejos podrás exprimir al máximo la capacidad de tu coche, para ganar unas décimas al cronómetro.


Frenos

Disco de freno al rojo vivo

Esta técnica de conducción deportiva es clave: saber frenar. Obviamente las pastillas y discos son lo esencial para conseguir una frenada perfecta, pero algo que no se tiene siempre en cuenta es el estado de los neumáticos. También es importante que los latiguillos o el líquido de frenos estén en un estado óptimo. El objetivo principal es tener clara la zona de frenada (que siempre será antes de la curva), de tal manera que se haga la curva con el pie derecho el acelerador. Hay que controlar muy bien la presión de frenada, así como el reparto de pesos en cada momento para evitar sustos. Prohibido frenar en mitad de la curva ya que tiene dos importantes riesgos. El primero es que, si frenas demasiado fuerte y bloqueas una rueda, tienes riesgo de perder tracción e irte recto. El segundo es que provocarás que todo el peso del coche vaya a la parte delantera del mismo, haciendo que la trasera sea mucho más ligera provocando el sobreviraje (que el coche se vaya del culo).

Punta tacón

Pasos para hacer el punta tacón

Es de las técnicas de conducción deportiva más famosa y conocida por todos. El objetivo de esta técnica es reducir de marcha mientras frenas, pero manteniendo sincronizadas las velocidades de los ejes primario y secundario de la transmisión. Esta operación no es nada fácil, ya que el objetivo es pisar el freno y el pie con el mismo pie, de ahí su nombre (frenar con la punta y acelerar con el tacón). Es necesario ese orden para tener una mayor sensibilidad en el freno y dosificar mejor mientras que el objetivo del tacón en el acelerador es simplemente dar un toque de gas para que las revoluciones no caigan cuando se está produciendo el desembrague. El resultado de esto es evitar tirones, no forzar mucho el embrague y optimizar la reducción de marchas.

Manos y posición del cuerpo

Posición correcta de las manos en el volante

No vayáis a lo fácil, no nos referimos a las manos en el volante y el cuerpo en el asiento, queremos ser algo más precisos y es que, aunque pueda parecer fundamental, es muy importante de cara a una conducción deportiva. Os aseguramos que es más importante la posición de las manos que saber hacer el punta tacón. Las manos siempre deben estar colocadas en los extremos laterales (a las 9 y a las 3) del volante, de esta manera, cuando lleguen las curvas, podrás girar lo suficiente sin tener que levantar las manos del volante. No hay que olvidar la posición general del cuerpo: con las manos en el volante, nuestros brazos deben generar un ángulo de 90 grados en la zona del codo. De esta manera en caso de colisión, nuestros brazos absorberán mejor el impacto. El resto del cuerpo podemos colocarlo de la manera que queramos, pero siempre quedándonos con una buena visibilidad y nunca colocándonos pegados al volante.

Acelerador

Como no íbamos a hablarte del casi más importante de todos, el acelerador. Y es que esta técnica de conducción deportiva es bastante evidente, pero su uso incorrecto, puede provocarte una mala experiencia. Es imprescindible conocer tu coche, saber cómo reacciona y saber qué tipo de mecánica tienes bajo el pedal. Debes conocer su rango óptimo de revoluciones para tratar de que siempre se mueva en su régimen de rpm ideal. También es importante tener un buen tacto del acelerador de ahí el colocar el pie en un lugar idóneo. La diferencia entre pisar el acelerador un segundo antes o uno después marca la diferencia en las técnicas de conducción deportiva: si te anticipas pisándolo, puedes terminar fuera del trazado o girado en mitad de la curva y si te demoras al acelerar, perderás un tiempo brillante. Conocer el potencial de tu motor, requiere tiempo y práctica, así que tómatelo con calma.

Doble embrague

Hablar de este doble embrague en un coche manual puede parecer curioso ya que solo existe un embrague. Es una técnica de conducción deportiva pensada como el punta tacón, para alargar la vida útil del embrague y que este sufra menos, no obstante, está en horas bajas, ya que cada la proliferación de cajas automáticas en coches deportivos es cada vez más común. El objetivo de esta técnica es sincronizar los ejes de la transmisión ante un cambio de marchas, no dejar que las revoluciones bajen mucho para evitar tirones y conseguir una mejor transición entre marchas. Esta maniobra es bastante más sencilla que la antes mencionada del punta tacón, ya que en esta ocasión «solo» tendremos que dar un toque de acelerador cuando el coche esté desembragando, así que este «truco» es fácil de hacer y sin ningún riesgo aparente.

¿Y si queremos que conduzca solo?

Lo contrario a lo que os acabamos de decir sería no hacer absolutamente nada con el coche y que condujese por si mismo. Y aunque al 100% todavía no es posible, si que tenemos coches muy avanzados en este aspecto.

BMW 745e

También tenemos derecho a relajarnos un poco al volante, por eso tenemos como ejemplo el BMW 745e con nivel 2 de conducción autónoma. Este nivel hace que la conducción sea parcialmente automátizada, lo consigue gracias al asistente de dirección y trayectoria y al asistente de atascos. Estos sistemas pueden acelerar y frenar automáticamente y asumir el control de la conducción.