Viajar no es solo cuestión de estatuas y museos. Carreteras, coches, paisajes, todos unidos, pueden dar lugar a auténticos monumentos…

En Sevencars tenemos una batidora en la que hemos mezclado todo lo anterior. A continuación vamos a enseñarte carreteras de todo el mundo que parecen auténticos monumentos. Sí, son construcciones, pero estos trabajos de la ingeniería moderna han dado lugar a verdaderas obras de arte en las que podemos deleitarnos de caminos hermosos, curiosos y en al algunas ocasiones extravagantes.

Beipanjiang (Guizhou)

China ha necesitado construir varios puentes para mejorar la conexión en la zona montañosa de Guizhou. Estos puentes ya forman parte del paisaje y a continuación te presentamos a la joya de la corona, el Beipanjiang, un genuino monumento.

Este puente es en la actualidad el más alto del planeta, teniendo nada más y nada menos que una altura de 565 metros. Para haceros a la idea, su altura es equiparable a la de un edificio de 200 plantas. Esta obra maestra de la ingeniería tiene además una longitud de 1341 metros, en la que conecta dos montañas sobre un rio. El hecho de que se construyese en apenas 3 años, es tan sorprendente como su altura.

Nudo de Corbata (Mallorca)

Mallorca, más conocida por sus playas y buen tiempo, esconde además de todo esto, un tramo de montaña (Sa Calobra) con la curva más cerrada del mundo. Para los aficionados a la conducción este es uno de los verdaderos monumentos de la isla.

Sa Calobra fue diseñada por el arquitecto Antonio Parietti y construida en 1932 a mano, sin ayuda alguna de maquinas, lo que todavía le da más valor. Se trata de una carretera estrecha, con pocos guarda raíles y sin marcas centrales en la vía. Esto, unido al mayor turismo en verano, convierten en complicada la conducción, haciendo de ella una de las carreteras más difíciles y peligrosas de transitar en nuestra península. ¿Quién dijo que los monumentos eran aburridos e inofensivos?

El camino de 15 km es increíble, 12 curvas de 180 grados y la más famosa de 360 grados de la que os hablábamos anteriormente, Nus de sa Corbata (Nudo de la corbata) donde la curva pasa por debajo de sí misma.

Puente lanzadera (Storseisundet)

Sevencars en sus puestos. Tres, dos, uno… despegamos. ¡Esperad!, no se trata de una lanzadera para aviones o cohetes, pero lo parece.

No, nos hemos vuelto locos, os presentamos el puente de Storseisundet en Noruega con esta particular forma de lanzadera espacial. No tiene ningún record mundial, pero el diseño de este puente hace que lo podamos incluir en nuestro listado de monumentos.

Este particular puente se ha ganado merecidamenteel título de “la construcción noruega del siglo”. Ubicado en la carretera costera atlánticaque recorre Noruega de norte a sur, el puente dibuja una trazada muy cerrada, ya que tiene que salvar una serie de accidentes geográficos (islas, canales) para seguir su camino. Según el punto de vista, esta estructura parece terminar en la nada, dando la sensación de que cualquier vehículo que suba acabe precipitándose al mar. Sin duda, en el mundo hay monumentos no aptos para todos los públicos.

Laerdal (Oslo)

¿Tienes claustrofobia? Imagina estar durante más de 20 minutos encerrado en un túnel. Exactamente 24,5 kilómetros, es la distancia que hay que recorrer de punta a punta para atravesar este trayecto catalogado como el túnel de carretera más largo del mundo.

Este monumento de la arquitectura es Laerdal y conecta la ciudad de Oslo y Bergen. En su construcción, para evitar la fatiga al volante y la sensación de claustrofobia, un equipo de psicólogos diseño tres cuevas a lo largo de todo el recorrido (una cada seis kilómetros). Estás grandes cuevas ofrecen una iluminación especial que recrea la sensación visual de conducir de día, permitiendo no forzar tanto la vista y romper la impresión de monotonía.

Laerdal también cuenta en su interior con áreas de descanso y conexión a internet, convirtiéndolo en uno de los monumentos más turísticos de los países nórdicos. Tanto es así que se han celebrado cenas incluso oficiado bodas dentro de él.

Coches convertidos en monumentos.

¿Un coche es una obra de arte? ¿Y si lo haces cachitos y lo pegas con superglue? ¿Y si haces una torre de coches viejos? ¡El arte es taaaaaan subjetivo, que nosotros queremos presentarte estos coches convertidos en monumentos.

1. Long Term Parking

Situado en Versalles (Francia), es uno de los monumentos más aclamados por los automovilistas nostálgicos. Y tiene su lógica, un gigantesco bloque de 19,5 metros de altura formado por 59 coches y 18 toneladas de hormigón.

Se trata de uno de los monumentos que más vehículos alberga de los setenta y ochenta, en los que se llega a identificar, Citroën 2cv, Renault 5, Simca 1000… es todo un desafío, adivinarlos todos.

2. Trans am tótem

Uno encima del otro, así es como se disponen cinco coches sobre un árbol, en uno de los monumentos más emblemáticos de Vancouver (Canadá). Esta obra de arte fusiona la naturaleza (tronco) con el consumismo (vehículos). Incluye un Honda Civic, Volkswagen Golf cabrío, BMW serie 7 coronados por un Pontiac Trans Am, dando nombre a la estructura de diez metros de altura y un peso de 11.340 kilos.

3. Alpine A110 (Reverter)

En nuestro país, más concretamente en Ourense, también encontramos monumentos relacionados con el automóvil. La estructura de bronce, tiene como protagonista un Alpine A110 de competición, junto a su piloto (Estanislao Reverter) y copiloto (Antonio Colemán). Reverter consiguió en apenas dos semanas construir un coche, con la base del Alpine y el motor de un Porsche, dando como resultado el “Alpinche”, cariñoso mote que se le adjudicó al coche. La ciudad tiene muchos monumentos, pero ninguno tan característico como este, que recuerda la primera entrada del Alpinche en el Rally Rias Baixas.

4. Carhenge

¿Recordáis los monumentos de  Stonehenge en Inglaterra? Se trata de esas famosas piedras del neolítico colocadas en forma de porterías creando una especie de circunferencia. Pues bien un artista americano (Jim Reinders) ha intentado imitarlo ¡pero con coches!

El sitio elegido por Jim no es por casualidad. En homenaje a su padre, planto estos coches en unas tierras que fueron propiedad de su familia.

Estos monumentos, constan de un total de 39 coches pintados de gris coronados por un Cadillac Caddy de 1962. El circulo tiene 29 metros de diámetro y no tenemos duda que si lo visitas te quedarás de piedra.